Durante la Semana de la Moda en Paris, muchos son los diseñadores que no quieren volver a la normalidad y olvidar todo lo aprendido. Tal es el caso de Jonathan Anderson, quien definitivamente no está en el campo de la moda para seguir siendo el mismo. De regreso en Loewe su propósito fue el de marcar un desfile con un cambio creativo masivo. Sus diseños reflejan un momento de experimentación, permitiendo así el nacimiento de una nueva estética para “empezar de nuevo”.
Un “espacio en blanco” especialmente diseñado, sin accesorios, sin ser una obra de arte, sin espacios disponibles que permitan desviar la atención: solo ropa. Al inicio del desfile, tres vestidos largos de columna negra. Cada uno tenía una estructura de metal debajo, empujando una forma geométrica 3D diferente, desde el estómago, el hombro y la cadera. Anderson tiene una mente inquieta, siempre luchando contra la respuesta demasiado obvia. “De una manera extraña, quería que la colección fuera histérica”, aseguro días antes del show durante una prueba de Loewe. “Para que haya tensión. Porque este es un momento extraño”, refiriéndose a la pandemia.
En los pies, había zapatos de tiras con tacones hechos de manera surrealista con velas de cumpleaños, botellas de esmalte de uñas y una pastilla de jabón. Las bolsas en lavanda o rojo estaban hechas de tela rígida de osos de peluche. Nada tenía “sentido”, pero ese era el atrevimiento y la fascinación de esta colección. “Vivimos en tiempos surrealistas” y Anderson lo entiende y lo refleja en la pasarela.
Para el primer desfile del director creativo de Saint Laurent, Anthony Vaccarello, presentó diseños elaborados en una línea de monos ceñidos a la piel y ropa de noche muy ajustada, que sus modelos lucieron bajo una impresionante cascada, aportando glamour extra a Semana de la Moda de París. Vaccarello muestra un estilo donde destacan piezas masculinas que, para él hablan más de la sensualidad de una nueva época. Desde el 2016, el diseñador ha sexualizado una idea burguesía hedonista, hasta formar este sello sobre su identidad en su paso por Saint Laurent y la más reciente colección sigue esa misma línea.
Los diseñadores Arnaud Vaillant y Sébastien Meyer, se refirieron a su colección como “Primavera Verano 2033”, porque se trata de sus sueños para el futuro. La colección tenía la dosis justa de extravagancia, con delicadas capas de conchas blancas que cubrían faldas minúsculas y blusas de bikini. Modelos con monos con incrustaciones de plata y faldas largas resplandecían como exóticas criaturas marinas, mientras que pantalones negros brillaban con destellos de remolinos o patrones de estrellas.
Por su parte, Acne Studios de Jonny Johansson presentó una colección Primavera / Verano 2022 modernamente delicada y elegante. La colección impulsa las tendencias recientes, desde el corsé hasta los básicos subversivos, al tiempo que incorpora elementos de crochet y zapatos de plataforma.
Lo cierto es que la extraña paradoja de la pandemia hizo que los diseñadores apuntaran más alto este año. Para muchos la línea, la forma, el ingenio subversivo y un dominio total del ajuste y la construcción, fueron piezas claves. Mientras que, para otros, sus colecciones mostraban un nuevo estilo en el redescubrimiento del cuerpo femenino.